LLÉGAMOS AL LLEGADERO COMO QUIEN DICE...

LLÉGAMOS AL LLEGADERO COMO QUIEN DICE...

-Alberto Rodríguez Seijas-

      La carga es demasiado pesada, se hace difícil controlarla, al mirar hacia atrás, no existen buenas memorias, la destrucción, es más que evidente, el hambre, la miseria, el odio, el rencor, la separación entre hermanos entre familias, la pérdida de amigos, de seres queridos, la desaparición de la moral, las buenas costumbres, el buen lenguaje hacen estragos en el ciudadano de hoy.

     La vida no tiene un valor, ni moral ni conceptual, la pierdes por un par de zapatos, un celular, o por una buena suma de dinero.

     La propiedad, el sacrificio, el valor, lo conquistado, lo sudado, los sueños…

     Han expropiado todo lo bueno que había en el país.

     Y llegamos al llegadero, las vías dentro de este túnel de ignorancia, se separan…

    Quien lo hubiese dicho que Venezuela en pleno siglo XXI tendría que escoger, entre la locura más despreciable de un comunismo y su abismo, o escoger la vía de las libertades democráticas el derecho a la vida, el crecimiento personal, con su respectivo co-ayudante crecimiento para la nación.

     Los campos antes productivos, son hoy un desolado escenario de maleza y hierba mala, las zonas industriales que hace 12 años atrás, eran vibrantes centros de producción de bullicio, de empleo, hoy en día se han convertido en cementerios de chatarra, y de un silencio lúgubre de una muerte anunciada.

     El país que se encontraba haciendo esfuerzos para lograr una independencia alimentaria, perdió la confianza su gente, volviéndose un productor de puerto, dependiendo como nunca antes de las compras internacionales de alimentos, para subsanar y palear de alguna manera el hambre y la falta de alimentos, por la equivocada política de expropiaciones de tierras, que nos llevó a la ruina alimentaria.

     Con pasividad asistimos y vimos la muerte de un productor del campo, la impotencia y la rabia, de no poder hacer nada, ni siquiera apoyarlo en su lucha, que a la postre era la lucha de un hombre, por los derechos de todos los Venezolanos.

     Brito… Amigo, no te hemos olvidado… Quienes hoy en día callan tu muerte, serán los mismo que mañana saldrán con tu bandera, a darse golpes de pecho por tu sacrifico al inmolarte por las campanas de la libertad.

   La fuerza y voluntad de la jueza Afiuni, quién con gran coraje llamó al art.350 y se adhiere al mismo en rechazo a los manejos arbitrarios de una corte suprema de justicia, totalmente arrodillada a la voluntad de un hombre, cuyo estamento político tiene sus bases fundamentadas en el la sangre derramada por varios golpes de estados, que nunca pagó ni fue juzgado y la entrega del país, a la ultra izquierda internacional, liderada por Fidel Castro, quien después de muchos intentos, inclusive el de invasión, ve su sueño realizado al meterle las manos a Venezuela, y su riqueza territorial.

     Vemos el coraje y la templanza de muchos presos de consciencia, por el solo hecho de no coincidir con el dictador golpista en sus pensamientos de pisotear la dignidad de un pueblo que en una gran parte le ha vendido el alma por unos kilos de comida, y una beca para no trabajar.

     Vemos con descrédito y profunda decepción, la humillación de las fuerzas armadas nacionales, al tener que rendirles honores a integrantes de las fuerzas armadas cubanas, que ordenan y mandan a nuestros militares, como si fueran soldaditos de hojalata. Paro aquí para no hablar del narcotráfico y sus tentáculos que también rondan estos lados. 

   Vemos como ha endeudado el país, comprometiendo seriamente el futuro de las próximas generaciones. Hace casi 12 años atrás, este país debía 32 mil millones de $ (Dólares) en deuda externa, y habiendo recibo en ese mismo lapso de tiempo la suma en dólares de lo que percibió la IV republica junta y mucho más, hoy debe 120 mil millones de $,(Dólares) y para evitar un default financiero se recurrió a un préstamo Chino por 20 mil millones de dólares, pagaderos a futuro con petroleo, comprometiendo aún más la soberanía del país.

     Vemos con inaudito descaro como los sueldo de empleados públicos de Cuba, Nicaragua, Bolivia y otros países dependen de las arcas venezolanas, mientras nuestro pueblo se muere de mengua, de hambre, de desatención, y vive en condiciones infrahumanas en barrios de alta peligrosidad por la inestabilidad de sus terrenos, y lo precario de sus construcciones.

    Ya no escandaliza a nadie los muchos asesinatos que ocurren todos los fines semana, en el territorio nacional, el año pasado 19.400 asesinatos, más que la suma de los muertos de Afganistán, Irak. Colombia y México juntos!!

    En Venezuela de cada 100 asesinatos solo se investigan 7 de lo cuales solo 2 llegan a juicio. El escándalo de terror y corrupción que significó,170 millones de kg de alimentos, vencidos, podridos, y a punto de vencerse, que fueron comprados con el dinero de todos los Venezolanos, enriqueciendo aún más las cuentas en el exterior, de la nueva burguesía, bolivariana hoy incrustada en el poder. (Jamás se investigó en la actual asamblea de focas bolivarianas)…

     Podría quedarme aquí escribiendo mas de un mes, y aún me faltaría tiempo, llenaría más hojas que una enciclopedia, si hablaría, de la verdad de los cortes eléctricos, la falta de inversión en planes vitales para el país, la falta de mantenimiento en el metro de Caracas, la falta de agua o la contaminación de la misma que llega a nuestros hogares,

etc. etc. etc.

  Todo esto que hemos visto durante estos últimos años, ha sido fruto de no haber tenido una Asamblea Nacional equilibrada, que sirviera de contra peso a las locuras de un hombre que en su ambición personal, destruyó un hermoso país, que si bien no era perfecto, carecía de todas las abominables y despreciables virtudes que según el bolivarianismo disfrutamos hoy. Aquella Asamblea Nacional fue capaz de elaborar, un proyecto de ley y aprobarlo en primera discusión de algo que no solamente le fue prohibido por expreso mandato del pueblo soberano, si no que también no existe ni como nombre, en la carta manga de nuestro país. (Las comunas). Aquella Asamblea Nacional traicionó la voluntad popular en múltiples ocasiones, mancillando amargamente la constitución de nuestro país, al aprobar leyes fuera del marco constitucional, que han llevado muchas de ellas, a la destrucción y hechos arriba narrados.

En estos tiempos, Venezuela decide si toma el camino de una dictadura de corte castro-comunista, con su respectiva hambre miseria o Muerte! O decide tomar el camino de la democracia, la vida y los derechos consagrados en nuestra constitución.

En estos tiempos, no hay excusas para Ni-NI, para indecisos, ni para vendidos al régimen del terror.

No pasará otro tren de libertad en muchísimos años en Venezuela, no habrá otra oportunidad para recuperar la soberanía y las libertades expresadas a nuestra carta magna.

Tener una mayorìa en la Asamblea es tan solo el primer paso, vital, necesario y de suma importancia para empezar a ver el principio del fin de la tiranía y corregir el rumbo del país hacia una verdadera democracia de bienestar, prosperidad, inclusión, y oportunidades igualitarias para todos.

TU DECIDES CON TU ATENCIÓN, APOYO Y PARTICIPACIÓN

…El principio del final o… ¡El final de un país!